Este libro de John
Boyne narra la historia de un niño alemán que se llama Bruno de
nueve años.Vive con su familia, influenciada por la corriente
del nazismo de la segunda guerra mundial.
Se mudan cerca de
un campo de concentración porque su padre es el encargado de manejarlo para exterminar a los judíos. Esto intenta hacerlo a
espaldas de Bruno y de su hermana, pero Bruno es muy curioso y se
hace amigo de un niño judío que se encuentra al otro lado de la
alambrada, sin saber que se trata de un campo de concentración. Deciden quedar un día para jugar al otro lado de la alambrada. Son niños, no se dan cuenta de la situación e ignoran el peligro que esto conlleva. Es aquí cuando de verdad
empiezan los problemas.
Recomendaría este
libro a gente de cualquier edad porque , aunque es algo triste, engancha y siempre quieres seguir leyendo para ver lo que pasa. Además nos puede servir para hacernos una idea de lo que fue en realidad esta etapa que los nazis denominaban "la solución final" desde los ojos de un niño.